Esta máxima de las peleas callejeras la aplica a la perfección el PIT-CNT y en especial los miembros de COFE, los empleados públicos sindicalizados.
Apenas escucharon -nuevamente en 25 años- unos tímidos comentarios sobre la reforma del Estado que podía implicar despedir empleados o bajarles las ínfulas, los muchachos de COFE salen a pedir un sueldo mínimo de mil dólares para los que recién ingresan a la sagrada Administración Pública.
Con el gato erizado arriba de la mesa, ¿quién se anima a decir que no sólo no hay que pagarles U$S 1.000 por mes, sino que hay que despedir a no menos del 35% de la plantilla? Y en los municipios hay que despedir al 80%. ¿Acaso se necesitan 5.000 empleados para administrar Canelones? ¿Para hacer qué? La basura la recoge una empresa privada, las calles las hacen y arreglan empresas privadas, la locomoción está en manos de empresas privadas .... Entonces?
Ningún político tiene el coraje de hacerlo. Y como bien señalaba el Dr. Daniel Ferrere en El Observador, hay que hacer lo que todos sabemos que hay que hacer. Y como no lo hacen ni se animan, votaré en blanco en las próximas elecciones municipales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario