Los emprendedores somos diferentes al resto de los mortales. Ni mejores, ni peores, pero sí diferentes. Incluso sobre la forma de encarar el fin de año y las vacaciones.
- A los emprendedores, el calendario gregoriano no les marca la agenda. Nuestra agenda la marcan nuestros proyectos. El 31/12 no termina nada ni el 01/01 comienza nada. Por eso no hacemos balances sólo a fin de año, sino que los hacemos todo el tiempo.
- Las vacaciones de verano no son un alivio para escapar del trabajo, sino un momento para recargar energías, elevar la creatividad y poder pensar más horas al día.
- Generalmente no nos gusta el "descanso pasivo", sino el "descanso activo". No somos de quedarnos largas horas tirados panza arriba en la arena, ni durmiendo largas siestas. Más bien nos gusta hacer deportes, reunirnos con amigos, leer y conocer nuevos lugares.
- Nos salimos de la rutina. En vez de veranear siempre en la misma casa, en el mismo balneario y en la misma fecha, procuramos cambiar. El cambio de entorno estimula el pensamiento, el conocimiento y nos abre a nuevas oportunidades.
La lista puede continuar, pero lo más importante es destacar nuestra actitud hacia la vida que la resumo en esta creencia:
"TODO TIEMPO PASADO FUE PEOR"
Si creyéramos lo contrario, ¿cuál sería nuestra razón de existir?
Un gran abrazo en este último "Gracias a dios es lunes" del 2010.
Felicidades
http://www.diadelosemprendedores.org/2010/12/emprendedores.html
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